Proyecto Frankfurt · Diseño Interior Bruto

Viajamos a Frankfurt para entrar en una vivienda cuyo interiorismo reposa en el amor al arte, el diseño y la sostenibilidad. En ella, el aparador Adara tiene mucho que decir.

Nos lo explica Olga Alonso, cofundadora e interiorista de Diseño Interior Bruto.

Momocca: ¿Frente a qué tipo de proyecto nos encontramos?

Olga Alonso: Nos encontramos frente a un proyecto de decoración de una vivienda en Frankfurt.

Partíamos de un espacio prácticamente vacío y diáfano en el que había que integrar zona de estar, comedor y entrada.

La vivienda debía adaptarse al estilo de vida de los clientes: una pareja joven con niñas pequeñas.

Buscaban una vivienda donde verse identificados y se reflejaran sus inquietudes en cuanto al arte, el diseño y la sostenibilidad.

M: ¿Cuál es la inspiración para llevar a cabo el interiorismo?

OA: Tras conocer a fondo los clientes marcamos como objetivo crear un espacio cálido y sosegado, que invitara a ser disfrutado y que tuviera una estética contemporánea con toques sofisticados.

También tuvimos en cuenta factores externos como el propio clima. Por tanto, necesitábamos crear un espacio que conectara el interior con el exterior de la casa, que irradiara un optimismo relajado con notas de color en dosis bien pautadas.

M: El interior tiene 3 componentes fundamentales: Materiales nobles, presencia de tapizados y ligeros toques de color. ¿Cómo se ha trabajado en este equilibrio?

OA: Tanto con la madera como con los textiles buscamos calidez, la sensación de un espacio que nos arropa.

La madera por su parte, en su acabado natural, nos sirve como una estupenda base neutra en este espacio. Está presente en todo el espacio en los diferentes elementos de mobiliario repartidos por el salón.

Con los textiles, nos decantamos por tonos neutros para las cortinas, alfombras y sofá.

El sofá, de diseño danés, se ve salpicada por los chispazos de color de los cojines que se unen al de los cuadros. Colores enérgicos muy presentes en la naturaleza, que nos ayudan a conectar con ella.

M: ¿Cómo encaja Momocca en este proyecto?

OA: Momocca encaja a la perfección en este proyecto, gracias al respeto por las materias primas y por el diseño tan depurado de sus piezas.

Tuvimos claro desde un inicio que el aparador Adara debía de ser el protagonista en esa pared de este salón.

Su diseño no puede encajar mejor, sus líneas orgánicas se funden en el espacio, y el sobre de mármol Carrara nos da ese plus de elegancia y sofisticación que necesitábamos.

M: Para terminar ¿Qué papel juega la iluminación?

OA: Quisimos diseñar un ambiente que, gracias a la decoración, maximizara los recursos de los que disponíamos. Era imprescindible diseñar un espacio en el que se potenciara la luz.

A la hora de elegir luminarias, nos decidimos por piezas escultóricas para el techo, como la lámapra Vertigo. Aportan notoriedad pero sin apabullar. Y, para la iluminación auxiliar nos decantamos por una lámpara de pie icónica de Miquel Milá, de diseño más sobrio.

De esta manera conseguimos una armonía total.