Hoy viajamos hasta el centro histórico de Pamplona para ver un interiorismo que invita a la calma y la tranquilidad. David Navarro de Paymobiliario nos cuenta, en esta entrevista, cómo es el proceso de transformar un antiguo palacete con elementos históricos en un apartamento con interiorismo de diseño minimalista.
Interiorismo de diseño minimalista
Lineas depuradas y suaves en un palacete del siglo XVII
Momocca: ¿A quién se dirige este proyecto?
David Navarro: Se dirige a una clienta que buscaba colores muy tranquilos y suaves, por ello elegimos esta paleta en concreto: blancos, grises… no quería mucho contraste porque ya venía de una vivienda con mucho contraste de color.
Además, tiene un trabajo muy estresante con un cargo de responsabilidad. Necesitaba llegar a su casa y encontrarse con un lugar tranquilo de colores suaves y sin contrastes.
Incluso me costó convencerla para introducir ciertos detalles de color como la lámpara de Verner Panton.
Momocca: ¿Qué necesidad se buscaba cubrir con este proyecto?
DN: El proyecto buscaba dar satisfacción a una clienta reformando una vivienda muy limitada en metros cuadrados que debía proporcionar calma y serenidad.
Nuestra clienta buscaba en este piso algo pequeño, acogedor, próximo a su trabajo y en el centro histórico de Pamplona.
De hecho, esta vivienda es un antiguo palacete y debíamos combinar de alguna manera los elementos arquitectónicos históricos con un producto de líneas depuradas, limpias y de colores suaves.
Momocca: ¿Cómo te inspiras para crear este ambiente?
DN: Más que inspirarme lo que realmente hago es escucharla y tratar de traducir sus pensamientos en acciones. Ella me comentó sus necesidades y gustos y en base a eso le propuse una serie de alternativas. Mi idea principal era de introducir varias piezas de sentido estético muy potente, pero con unos acabados más suaves para bajar esa estética protagonista y buscar muebles con las necesidades que ella me ha trasladado.
Para suavizar el ambiente buscamos unas líneas de diseño más amables, con formas curvas para contrarrestar la dureza de la distribución original. Siempre respetando los detalles de planta antigua. Así que nos basamos en seleccionar mobiliario de estas características para contrarrestar estos elementos.
Momocca: Según lo anterior, ¿es por esto que elegiste el aparador Adara para este proyecto?
DN: Queríamos poner un aparador en la entrada y debía ser “ese aparador”. En otros elementos planteé otras opciones, pero con el aparador lo tenía claro, por la forma curva que tiene enlaza perfectamente con el sofá Serene de Joquer y con las mesas y las sillas de &tradition.
En cuanto a los acabados blanco y negro, ella no es amiga de muebles en madera, quería muebles en tonos neutros, homogéneos sin vetas en la madera. Incorpora un único acabado con perfil negro que queda interesante con la Lumina de Daphine Terra. Una pieza icónica que realza el conjunto.
El propio mueble se beneficia de la lámpara y la lámpara del mueble. Son dos piezas que quedan compensadas y bonitas, encima colocamos dos jarrones Littala de Álvaro Aalto.
En la decisión de incorporar un Adara ni la clienta ni yo tuvimos dudas.
Además, ya conocía el diseño y sabía que encajaría perfectamente.
Momocca: ¿Cómo es el proceso de mantener los elementos históricos del propio edificio con un espacio tan minimalista?
DN: Este edificio es muy singular, así que recuperamos y saneamos las vigas del techo y decidí aplicar también madera en suelo y paredes, el resultado es un aporte de calidez y confort. Además, también permitía disimular algunas deficiencias, ten en cuenta que es un edificio del siglo XVII y esto conlleva que tenga ciertas protecciones. Había que buscar el equilibrio entre respetar la arquitectura y adaptarnos a la clienta.
En el caso de la pared interior de piedra, la mantenemos porque es un elemento muy interesante. Como además esta pared da al balcón con vistas a la plaza de los ajos se consigue que este elemento singular de la vivienda haga de nexo de unión entre el centro histórico y el interior de la vivienda.
Finalmente, la incorporación de plantas es un empeño mío. La vivienda da una zona arbolada y quería trasladar este elemento orgánico, amable y fresco que las plantas dan. Además, también ayuda a romper con la rectitud de las líneas de la vivienda.
Momocca: Para terminar, ¿Qué es lo más destacable de este proyecto?
DN: Lo primero el reto de la rigidez de diseño original, la limitación de metros cuadrados y el hecho de que determinados elementos estuvieran protegidos. Todo tenía un carácter como más antiguo y debía transformarse en minimalismo, diseño y modernidad, pero siempre manteniendo esa atmósfera que invitara a la calma.
Aquí se realza la importancia de saber escuchar al cliente. Nosotros como interioristas o decoradores podemos tener unos criterios que no siempre coincidirán con los del cliente. Si hacemos lo que nosotros consideramos caemos en el error de incluso generar un mal ambiente.
En este caso, yo podía asesorar y dar mi punto de vista, pero lo importante siempre era que la última palabra la tuviera ella. A mi juicio, imponer un criterio es un gran error en esta profesión.
Desde Momocca agradecemos a David Navarro su tiempo para esta entrevista y su confianza en nosotros al incorporar este aparador en madera lacada en blanco de la Colección Adara en este proyecto de interiorismo de diseño minimalista.