M: Para conseguir ese aire wellness, ¿cómo habéis trabajado con la paleta de colores en la distribución, intención de cada área y su funcionalidad en el espacio?
UI: La paleta de colores elegida se basa en lo terrenal y en lo natural, dando esos toques de rosa, que tiene propiedades para curar el dolor y la tristeza, que restaura la juventud y favorece a la reflexión y meditación. Es un concepto de colores relajantes que te ayudan a conectar con la naturaleza y contigo mismo.
El espacio se divide en dos zonas muy marcadas que son el pasillo y la habitación. El pasillo es el reflejo de lo que vivimos el día a día y la habitación es nuestro rincón de bienestar, dividido en varias áreas:
La zona de descanso, donde está la cama. La idea es que para dormir, llegues, te cierres y te relajes observando la obra de arte que está inspirada en tres elementos volátiles y momentos preciosos que nos regala la naturaleza: cielos rosados, nubes entrelazadas y la luna llena.
Detrás de ésta, se encuentra la zona wellness con el tocador y vestidor, la bañera, en la que te puedes dar un baño relajante rodeado de naturaleza. Finalmente, junto a la ventana, la zona fitness, para meditar y hacer yoga.